Es, junto a Mequinez, Fez y Rabat, una de las cuatro ciudades imperiales de Marruecos.3 Fue fundada en 1062 por los almorávides y fue la capital del Imperio islámico. La ciudad posee el mercado tradicional (suq) más grande del país y una de las plazas más concurridas de África y del mundo, Djemaa el Fna.4 En la plaza se citan acróbatas, cuenta-cuentos, vendedores de agua, bailarines y músicos. Por la noche, la plaza se llena de puestos de comida, convirtiéndose en un gran restaurante al aire libre.
Vista del interior de un riad
Ruinas en las afueras de la ciudad
Cristales y vidrios multicolor
Vista de la plazuela de Marrakech
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